Napoli Melilla
En torno a las clases mucho más acomodados floreció un especial género de humanismo, poderosamente conservador, caracterizado por el culto de la tradición clásica latina, de la retórica y del derecho. Ya antes del nacimiento de los seminarios, curas y aristócratas laicos subvencionaban centros de cultura que constituyeron, en Apulia y Calabria, la única forma de modernización civil que las innovaciones administrativas y burocráticas de la Casa de Aragón demandaban, mientras la economía y el territorio quedaban excluidos de los cambios producidos en el resto de Europa. Desde el siglo XVI la estabilización de los confines adriáticos, tras la guerra de Lepanto y el fin de las amenazas turcas sobre las costas italianas, llevaron, salvo extrañas excepciones, a un intérvalo de tiempo de relativa calma en Italia meridional, a lo largo del como barones y feudatarios lograron gozar los antiguos derechos señoriales para consolidar privilegios económicos y productivos. Después de la desaparición de Felipe III de España, le sucedió su hijo Felipe IV de España como rey y Antonio Álvarez de Toledo y Beaumont y Fernando Afán de Ribera y Enríquez como virreyes de Nápoles. Les siguió Manuel de Acevedo y Zúñiga, que financió las fortificaciones de los puertos de Barletta, Baia y Gaeta, con un gobierno poderosamente empeñado en el acompañamiento económico al ejército y a la armada.
Después de la crisis política, el gobierno español procuró con la represión restituir el orden en el reino, mientras que la crisis financiera era cada vez más catastrófica. En 1702 quebró el Banco de la Anunciada; en estos años Felipe V de España, de viaje en Nápoles, en 1701 condonó las deudas de las universidades.
Carlos I
El porcentaje de camas ocupadas por pacientes con coronavirus en España baja unas décimas respecto al día anterior y se sitúa en el 22,21% (cifra que supera el umbral de riesgo máximo del 15%). El porcentaje de camas de Cuidados Intensivos apenas se mueve unas décimas en 24 h, situándose en el 44,86% (muy por arriba asimismo del umbral para riesgo muy alto, que está en más del 25%). Una vez más, recalcamos que estas cantidades son solo de pacientes Covid, hay que agregar los que llenan camas de UCI por otras patologías o intervenciones y, por consiguiente, el grado de saturación es aún mayor, del cien% o mucho más en algunas autonomías. Si el jueves observamos una leve bajada en el número de fallecidos diarios, los 584 de las últimas 24 horas nos dan una bofetada de situación y nos señalan que aún quedan varios días con cifras afines, reflejo de la enorme incidencia y la alta cantidad de contagios de semanas pasadas y del elevado número de hospitalizados que aún continúan en nuestros hospitales. Registrados en los últimos siete días son 1.951 decesos, lo que suma un total de 61.385 muertos en España en lo que llevamos de pandemia. Los nuevos casos en las últimas 24 horas son 28.565, de los que diagnosticados el día previo son 11.073 (3.045 en La capital de españa, 1.266 en Castilla y León, 1.167 en Cataluña y 1.108 en Red social Valenciana), lo que hace un total de 2.941.990 casos en nuestro país desde el inicio de la pandemia. Esta primera semana de febrero se despide con la inclinación observada desde finales de la semana anterior, el lento descenso de los contagios y de la incidencia acumulada en nuestro país.
Floreció bajo su regencia la Academia de los Ociosos, a la que adhirieron entre otros Marino y De ella Porta. Edificó el instituto de los jesuitas llamado San Francisco Saverio y un complejo de factorías en la porta Nolana. En Terra di Lavoro inició las primeras proyectos de saneamiento de la llanura del Volturno, confiando a Domenico Fontana el emprendimiento de los Regi Lagni.
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Los últimos virreyes por cuenta de España fueron Luis Francisco de la Cerda, empeñado en reprimir el bandolerismo y el contrabando, y Juan Manuel Fernández Pacheco, cuyo mandato de gobierno fue impedido por la guerra y coherente ocupación austriaca de 1706. Los virreyes que lo sucedieron encontraron un leve balance positivo en las entradas del reino, gracias también al saldo de los costos que las operaciones militares habían irrogado. En 1728 el virrey Michael Friederich Althann instituyó el público Banco de San Carlos, para financiar la iniciativa privada de carácter mercantil, salvar los títulos de deuda pública y liquidar la mano muerta eclesiástica. El mismo virrey se ganó la enemistad de los jesuitas por haber tolerado la publicación de las proyectos de los anticlericales Giannone y Grimaldi.
- En 1555, después de una serie de derrotas en Europa, Carlos abdicó y dividió sus dominios entre Felipe II, a quien dejó España, las colonias de América, los Países Bajos Españoles, el Reino de Nápoles, el Reino de Sicilia y el Reino de Cerdeña, y Fernando I de Austria a quien dejó Austria, Bohemia, Hungría y el título de emperador.
- Al tiempo, Fernández de Córdoba dejó el título de gran capitán y el mando de las tropas reales de Nápoles se confió al conde de Tagliacozzo, Fabrizio Colonna, con el título de gran condestable y el encargo de conducir una expedición en Apulia contra la República de Venecia, que ocupaba algunos puertos adriáticos.
- Fernando el Católico, poseedor de los títulos de rey de Nápoles y rey de Sicilia, nombró a quien había sido hasta entonces gran capitán del ejército napolitano, Fernández de Córdoba, virrey, otorgándole los poderes del rey.